Biden acusa a Netanyahu de no hacer esfuerzos para garantizar un acuerdo de alto el fuego
El presidente estadounidense, Joe Biden, afirma que Washington está “muy cerca” de presentar una propuesta definitiva para un acuerdo entre Israel y Hamás que permita también la liberación de los rehenes, y también ha acusado a Benjamin Netanyahu, el Primer Ministro Israelí, de no estar haciendo los suficientes esfuerzos para llegar al acuerdo del alto el fuego en Gaza.
Al ser preguntado si cree que este impulso tendrá éxito cuando otros intentos de lograr un alto el fuego en Gaza han fracasado, Biden ha expresado que “la esperanza es eterna”. Igualmente, Biden ha respondido con un simple “no” cuando un periodista le ha preguntado si Netanyahu está haciendo lo suficiente para conseguir un acuerdo de alto el fuego con Hamás.
A pesar de que el gobierno de Biden ha intentado distanciarse de Netanyahu en los últimos meses, en medio de la impopularidad de la guerra de Israel contra Gaza entre los partidarios demócratas en particular, la crítica es una de las más abiertas realizadas por el presidente estadounidense, aunque haya sido breve y aparentemente improvisada.
Biden se ha reunido con el equipo estadounidense que negocia la liberación de los cautivos después realizar estos comentarios para recibir información actualizada sobre el estado de las conversaciones, según ha informado la Casa Blanca. Dicho renovado esfuerzo por alcanzar un alto el fuego se produce dos días después de que seis israelíes cautivos, entre ellos un ciudadano estadounidense, fueran hallados muertos en Gaza.
El descubrimiento ha desencadenado protestas masivas y huelgas en todo Israel para exigir un acuerdo que permita liberar a los casi 100 israelíes que permanecen retenidos por grupos palestinos en Gaza.
Mientras, Israel ha continuado con su bloqueo y bombardeos sobre Gaza. Estados Unidos es el principal proveedor de armas y aliado diplomático de Israel. Desde el comienzo de la guerra en octubre, Washington ha vetado tres propuestas del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que habrían pedido un alto el fuego en Gaza. En marzo se abstuvo en otra votación que exigía un alto el fuego inmediato.
Estas declaraciones de Biden sobre Netanyahu parecen contradecir las declaraciones de sus ayudantes, que han culpado a Hamás del fracaso en la consecución de un acuerdo. El mes pasado, desde la Casa Blanca se afirmó que había presentado una “propuesta puente” para finalizar el acuerdo, basada en una propuesta que Biden había presentado en mayo.
El plan inicial respaldado por Estados Unidos contemplaría un esfuerzo en varias fases para poner fin a la guerra, comenzando con una pausa de seis semanas en los combates que permitiría la liberación de algunos cautivos israelíes retenidos en Gaza y de prisioneros palestinos en cárceles israelíes.
Posteriormente en la segunda fase, se pondría fin definitivamente a los combates y se liberaría a todos los cautivos israelíes restantes. La última parte del acuerdo incluiría la reconstrucción de la Franja de Gaza, devastada por la guerra israelí.
El pasado mes de agosto, el Secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, afirmó que Netanyahu había “aceptado” la propuesta de puente estadounidense y que Hamás debía hacer lo mismo, afirmación de la que se hicieron eco otros funcionarios estadounidenses. Sin embargo, Netanyahu ha insistido en que Israel debe mantener el corredor Filadelfia, el lado palestino de la frontera entre Gaza y Egipto y por donde Israel sostiene que Hamás introduce armas de contrabando en el país,
Netanyahu ha dado a entender que no está dispuesto a transigir y ha insistido en que el control israelí del corredor Philadelphi es una parte necesaria de cualquier acuerdo de alto el fuego. «Este es el oxígeno de Hamás», ha dicho, añadiendo que «Nadie está más comprometido con la liberación de los rehenes que yo. Nadie me va a sermonear en este asunto».
El principal aliado de Israel parece estar cansándose de su intransigencia.
Los medios de comunicación estadounidenses e israelíes también han informado de que el gobierno israelí pretende mantener una presencia en el centro de Gaza para restringir el movimiento de los palestinos desplazados hacia sus hogares en el norte del territorio. Netanyahu también ha insistido de forma repetida en que no aceptaría ningún acuerdo que supusiera el fin permanente de la guerra sin una “victoria total” sobre Hamás.
En los últimos meses se han celebrado varias rondas de conversaciones indirectas en Egipto y Qatar. Pero Hamás y otros grupos palestinos afirman que cualquier acuerdo debe incluir el fin permanente de la guerra y la retirada total de Israel de Gaza.
En Estados Unidos, la muerte de un ciudadano estadounidense entre los seis cautivos el sábado ha avivado las peticiones de alto el fuego por parte de algunos demócratas. Sin embargo, los republicanos han señalado con el dedo a Biden y a su vicepresidenta, Kamala Harris, candidata demócrata a las elecciones presidenciales de noviembre.
“Lamentamos la muerte sin sentido de los rehenes israelíes, incluyendo horriblemente a un maravilloso ciudadano estadounidense, Hersh Goldberg-Polin, asesinado por Hamás debido a una completa falta de fuerza y liderazgo estadounidense”, escribió el candidato republicano Donald Trump en un post en las redes sociales el domingo. “No se equivoquen: esto sucedió porque la camarada Kamala Harris y el corrupto Joe Biden son malos líderes”.
Harris se había comprometido a seguir armando a Israel a pesar de las crecientes atrocidades y acusaciones de genocidio en Gaza. El sábado, la vicepresidenta estadounidense hizo pública una declaración en términos contundentes en la que calificaba a Hamás como “malvado” y afirmaba que el grupo “no puede controlar Gaza”. Harris no mencionó el acuerdo de alto el fuego en sus declaraciones.