La Unión Europea busca un acuerdo para financiar a Ucrania con el veto de Hungría

Los líderes de la Unión Europea intentarán convencer hoy al Primer Ministro húngaro, Viktor Orbán, de que se sume a un plan para ofrecer una financiación estable a Ucrania, pero también están dispuestos a proporcionar dicho efectivo a Kiev sin Hungría en caso de que sus argumentos fracasaran.

El plan consiste, por un lado, en ayudar a cubrir las necesidades de Ucrania para 2024-2027 con 33.000 millones de euros en préstamos y 17.000 millones de euros en subvenciones por otro. El dinero provendrá del presupuesto de la Unión Europea para dar a Kiev una financiación más constante en su lucha contra la invasión rusa.

La Unión Europea lleva ayudando a Ucrania desde que Moscú la invadió en 2022, pero hasta ahora lo ha hecho mediante acuerdos intergubernamentales que requieren aprobaciones nacionales cada año y son más costosos y complejos que la financiación a través del presupuesto de la Comunidad.

Esta estabilidad de la financiación cuatrienal que proporcionaría el presupuesto de la Unión Europea es ahora más importante, teniendo en cuenta este momento en que la ayuda financiera de Estados Unidos, otro gran proveedor de ayuda a Ucrania, es incierta debido a las luchas internas en el Congreso estadounidense.

Para utilizar el presupuesto de la Unión Europea, los 27 países miembros tienen que estar de acuerdo, y Hungría, que cultiva estrechos lazos con Moscú, quiere poder vetar los desembolsos cada año. Los otros 26 países de la Comunidad han rechazado la exigencia húngara y mantienen un pulso con Hungría desde diciembre.

La cumbre de hoy, convocada para resolver la cuestión, es la última oportunidad de llegar a un acuerdo antes de abandonar el presupuesto de la Unión Europea como forma de financiar a Ucrania y volver de nuevo a la financiación más compleja, costosa y más inestable utilizada anteriormente. La Unión Europea no puede esperar más, porque se prevé que Ucrania se quede sin efectivo para el funcionamiento normal del Estado en marzo.

Para satisfacer en parte las exigencias de Orbán, los líderes propondrán celebrar un debate anual sobre cómo invierte Ucrania la ayuda recibida de la Comunidad, sin conceder a Hungría el derecho a vetar el dinero, según se desprende de un borrador de propuesta preparado para la reunión.

«El Consejo Europeo celebrará un debate anual sobre la aplicación del mecanismo con vistas a proporcionar orientaciones sobre el enfoque de la Unión Europea respecto a la situación derivada de la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania», apunta el borrador.

No está claro si Orbán aceptará este acuerdo. El embajador de Orbán ante la Unión Europea manifestó a sus homólogos en una reunión preparatoria celebrada durante el día de ayer que Budapest seguía queriendo tener poder de veto.

Mientras, en el transcurso de la guerra una bomba rusa ha alcanzado un hospital del noreste de Ucrania, destrozando ventanas y equipos y provocando la evacuación de decenas de pacientes, según han informado las autoridades regionales.

Volodímir Tymoshko, jefe de la sección regional de Járkov de la policía nacional, ha informado de que una bomba ha impactado directamente en el hospital sobre las 21:45 en la ciudad de Veliki Burluk, al noreste de Járkov. Una segunda bomba cayó cerca.

También ha informado en redes sociales de que 38 personas habían sido evacuadas del centro, todas ellas pacientes menos cinco y dos confinadas en camas de hospital.

El gobernador regional, Oleh Synehubov, ha escrito en la plataforma Telegram que los equipos de emergencia han llevado a cabo operaciones de limpieza hasta bien entrada la noche y que cuatro personas fueron tratadas por heridas leves en el lugar. Synehubov ha añadido que la rápida actuación del personal del hospital en respuesta a las alertas de ataque aéreo ha garantizado una evacuación sin contratiempos. Los pacientes fueron enviados a otros centros o pasaron a recibir tratamiento ambulatorio.

Las imágenes publicadas por los servicios de emergencia ucranianos en Telegram mostraban prácticamente todas las ventanas del hospital destrozadas. En el exterior, la calle estaba llena de materiales de construcción destrozados. Las habitaciones mostraban equipos dañados y escombros esparcidos por todas partes.

No ha habido verificación independiente del incidente, pero en las últimas semanas ha habido frecuentes ataques rusos contra objetivos en la región de Járkov. El Ministerio de Defensa ruso tampoco ha respondido inmediatamente a la petición de comentarios.

Rusia niega haber atacado instalaciones civiles, aunque en la guerra, que dura ya más de 23 meses, se han visto afectadas instalaciones médicas y educativas. El alcalde de Járkov, Ihor Terekhov, ha manifestado en Telegram que los drones rusos han alcanzado otro objetivo de infraestructura en la ciudad. No se han realizado comentarios sobre víctimas.